El pasado y el futuro, efectivamente, se funden en este elegante proyecto de residencia unifamiliar construido en la Antigua Corinto (Grecia). Edificada en el año 2005, esta preciosa casa parte de un proyecto del arquitecto griego Spiros Papadopoulos, y se encuentra en una finca en cuya zona sur se estableció una excavación arqueológica tiempo antes de que la casa se construyera.
La idea del arquitecto fue mantener en lo posible el “espíritu” de la excavación y la relación de la vivienda con los alrededores, plenos de interés histórico.
El paisaje particular de la zona también se tuvo muy en cuenta a la hora de diseñar el proyecto. De esta manera, se optó por crear un muro exterior de forma cuadrada que crea un marco adecuado para toda la estructura, y también genera frontera clara que separa la casa de la excavación. Dentro de esta especie de “concha” se alza la vivienda como edificio independiente, surgiendo del terreno en sentido vertical como prolongación de los edificios previamente erigidos en su lugar.
Por otra parte, la zona sur de la excavación (que forma parte ahora de la vivienda) se ha dejado a la vista para que sirva como testigo de las distintas construcciones que se fueron levantando en la zona a lo largo de los siglos. La casa en sí se desarrolla en dos niveles: la planta baja, con una comunicación constante con el espacio exterior, y la superior, donde se puede escoger entre un espacio íntimo cerrado por celosías o uno más abierto, con vistas hacia el horizonte desde la magnífica azotea.
Fotografías: Charalampos Louizidis.