El nombre de esta construcción es Casa Shaw, y tras ser edificada fue una auténtica sensación por lo arriesgado de su estilo y el lujo que ofrece en sus espacios. Situada en una estrecha finca frente al mar en Vancouver, es un proyecto del estudio Patkau Architects y además de lo atractivo de su diseño, las vistas que ofrece sobre el mar y sobre las montañas de la costa oeste de la bahía la convierten en una auténtica villa de lujo.
La casa está organizada de forma que los espacios comunes se encuentran en la planta media, con una sala para música en la planta baja y una habitación, estudio y piscina en la planta superior.La piscina es probablemente uno de los elementos más espectaculares de la casa, ya que su fondo de cristal permite ver el agua y a los bañistas desde la planta inferior. La luz tamizada por el agua también llena de decorativos reflejos las paredes y las estancias. La piscina tiene terrazas a ambos extremos y se extiende por toda el ala oeste de la vivienda.
Al tratarse de un edificio muy estrecho, los espacios sólo se pueden extender hacia afuera y hacia arriba. Los techos grandes agrandan las estancias; la claraboya sobre la piscina aporta luz natural y permite iluminar el comedor, que sube desde la planta baja hasta el nivel superior. La entrada pasa directamente por debajo de la piscino, lo que sirve como espectacular bienvenida para quienes entran en esta increíble vivienda.
Fotografías: © Paul Warchol, Undine Prohl.
