Una magnífica casa de una planta que trata de conectar los espacios interiores con el exterior. Así podría definirse la Hacienda Sac Chich, proyectada en 2010 por Reyes Ríos y Larraín Arquitectos en Acanceh, un antiguo emplazamiento maya en Yucatán, México.
Un volumen regular de líneas rectas dotado de grandes ventanales para poder divisar el bello paisaje en todo momento. Este fue uno de los objetivos, el principal, de los arquitectos que se encargaron de diseñarla.
Abierta al paisaje
Quizá lo que más llama la atención de esta magnífica casa mexicana, sea la forma en que se ha dotado de relevancia al exterior, que se contempla desde casi todas las estancias, ya sea el salón o los dormitorios. Dispone de una gran extensión de césped y de una piscina tipo acequia, de un lado, perfecta para combatir el calor del verano. Del otro lado, hay un estanque con plantas acuáticas del otro lado.
Las superficies de los interiores son de cemento pulido que se ha teñido de color arena, tanto en los suelos como en techos y paredes. En lo que se refiere a la decoración, la Hacienda Sac Chich propugna la sencillez elevada a la máxima potencia. Pocos muebles, funcionales pero también decorativos, completan los ambientes. Además, se realizaron muchos muebles de obra, como los estantes del salón, los soportes de las camas y los cabeceros, y el mobiliario de baño. Eso le da a los espacios un toque muy original.
