El estudio S-AR Stación-Arquitectura es el responsable del proyecto que dio lugar a esta elegante casa, que cuenta con 360 metros cuadrados de superficie y se encuentra en México. La vivienda fue diseñada, de acuerdo con sus creadores, a modo de “santuario” donde la familia pudiera alejarse del concurrido entorno urbano que la rodea.
La arquitectura generada en el proyecto está formada por una serie de espacios bien definidos, que rodean a los habitantes de la vivienda. Edificados con cemento en bruto, los interiores despliegan el rudo atractivo de este material, sin esconderlo tras revestimientos ni pinturas.
Un homenaje a los artesanos
La vivienda se llama Casa 2G y su simplicidad (en lo que a líneas y materiales se refiere) es un homenaje al trabajo de los artesanos locales. La básica naturaleza de esta construcción pretende contrastar con la engañosa idea de progreso de la que presume un mundo dominado por las apariencias y las modas. Las enormes ventanas y vanos dejan ver los cambios del entorno natural, tanto a lo largo del día como con el paso de las estaciones.
Interiores que se abren
Cuando llega la noche, la casa abre su interior y la luz procedente de la chimenea central llena de paz las estancias, vibrando sobre la ruda superficie de los muros de hormigón. La vivienda está formada por un sencillo volumen rectangular, con un patio que separa las zonas sociales del área privada. Ubicada en una zona residencial, ante la fachada principal hay una explanada con calzada y patio que separa la casa de la calle.
Fotografías: Ana Cecilia Garza Villarreal.