Una estructura básica realizada con muros de cemento blanco: esta preciosa villa de estilo contemporáneo es un ejemplo del mejor minimalismo. La casa se levanta en Oporto (Portugal) y es un proyecto del año 2011 llevado a cabo por Topos Atelier de Arquitectura, Lda.
El equipo, integrado por los arquitectos Jean Pierre Porcher, Margarida Oliveira y Albino Freitas en colaboración con Sofia Lima, Michael Ferreira, diseñó una vivienda unifamiliar de 485 metros cuadrados de superficie que se caracteriza por su belleza intemporal y su majestuoso alzado.
La idea surgió a partir de un recorrido por una espiral de acero creada por el escultor contemporáneo Richard Serra, cuya obra se basa en enormes estructuras escultóricas con formas básicas en las cuales el espectador puede penetrar. La casa, al igual que la espiral del artista, se estructura alrededor de un muro continuo de cemento blanco sin revestir: el recorrido comienza en la chimenea y se extiende hasta los límites de la planta.
Siguiendo el concepto de la obra de arte, el estudio se planteó dos objetivos: crear para el interior de la vivienda un concepto de “máquina de emociones”, y en el exterior aportar unidad a la construcción y fusionar su sencillez con el entorno que la rodea. El jardín cuenta con una elegante piscina rectangular que parece encaminar al visitante hacia la casa, y también con un atractivo huerto-jardín con una concepción paisajística de vanguardia. La valla exterior a base de paneles de metal oxidado hace juego con la barandilla del balcón, del mismo material, que se combina a la perfección con la blancura resplandeciente del cemento de las fachadas.
Fotografías: Xavier Antunes.