Residencia espectacular en la costa del Pacífico


Construido en cemento en bruto, este impresionante edificio se integra a la perfección en la exuberante vegetación que adorna la costa californiana. La Casa Atalaya pertenece a una pareja y se alza sobre una estrecha sierra, gozando de las mejores vistas del Océano Pacífico, los valles que la rodean y las lejanas montañas.

El diseño del arquitecto Alberto Kalach permite gozar de vistas de 360 grados alrededor de la casa. De esta forma, sus habitantes pueden disfrutar tanto del amanecer como de la puesta de sol.


La vivienda se construyó en el año 2008 y disfruta de una superficie útil de nada menos que 1100 metros cuadrados. Concebida en forma de serie de terrazas que se escalonan para salvar el desnivel, la casa revela distintos ambientes y goza de diferentes vistas, tanto sobre el paisaje como de los jardines y patios privados que forman parte del proyecto. En la entrada, un jardín de sombra conduce al visitante a la casa, donde una pequeña cámara actúa como recibidor y da paso a una galería de arte con iluminación indirecta que conduce tanto al salón como a la terraza principal.


En la parte trasera se ubica el comedor provisto de un lucernario. La sala de estar actúa como puente con la terraza de la piscina, y también conduce a la biblioteca, el estudio, los dormitorios… Cada uno de los espacios tiene su propia personalidad e iluminación, aunque todos ellos se ven coordinados por la presencia del cemento con el que se construyó la mansión.

Fotografías: Yoshihiro Koitani.

Deja una respuesta