En el norte de Suecia, muy cerca del pequeño pueblo de Harads se encuentra el Treehotel, un proyecto finalizado en el año 2011 y que es producto de la imaginación y el buen hacer del estudio de arquitectura Tham & Videgård Arkitekter. Su nombre define a la perfección el tipo de hotel ante el que nos encontramos: Treehotel, hotel de árbol.
La idea era instalar una estructura de aluminio ligera, de forma cúbica y con cuatro metros de lado. El exterior está revestido de paneles de espejo para que los árboles se reflejen en él, y así integrar completamente las estructuras en el entorno.
El interior del módulo está completamente realizado en madera contrachapada, y cuenta con ventanas en todas las paredes de forma que quienes se alojen en el Treehotel puedan obtener unas vistas de 360 grados de los alrededores. Se trata sin duda de una forma perfecta de sentirse plenamente integrado en la naturaleza, al tiempo que nos alojamos en un hotel completamente vanguardista.
Me ha gustado mucho la ingeniosa manera en la que los arquitectos han solucionado un grave problema: evitar que los pájaros se choquen con el módulo, al no distinguirlo del cielo que lo rodea. Para ello se ha introducido una lámina ultravioleta transparente en cada panel de espejo, sólo visible para las aves. Los visitantes disponen en su habitación de espacio para dos personas con baño, dormitorio, sala y una azotea aterrazada. A los módulos se accede por una escalera de cuerda y un puente del mismo material. Más o menos, es como vivir en la casa de Tarzán… En pleno siglo XXI.
