El equipo de arquitectos del estudio belga Baumraum son los responsables de la etérea The Treehouse (La Casa-Árbol), un proyecto diseñado con la intención de agrupar en una construcción la conservación del medioambiente y el cuidado de las personas, el planeta y sus riquezas. Es una casa ideada con el propósito de “salvar el hueco existente entre la economía y la ecología”.
Así, esta bella vivienda no es solo una casa en los árboles sino que constituye una pequeña maravilla arquitectónica, equipada con instalaciones a la última y situada en los bosques de Hechtel-Eksel (Bélgica). Tan sencilla como inteligente, The Treehouse llama la atención por su liviandad.
Un proyecto para concienciar
Esta vivienda, en realidad, no es un proyecto habitado y encargado por un particular, sino una propuesta de varios agentes (entre los que se incluyen organismos públicos y la comunidad de Hechtel-Eksel) para que las empresas se “pongan las pilas” en materia de sostenibilidad, durante sus actividades cotidianas. ¿Qué mejor manera de conseguirlo que construir una casa en los árboles?
Energía verde
Todas las instalaciones obtienen los suministros (electricidad verde y depuración de aguas) del museo que se encuentra en las proximidades, aunque algunas de ellas son autosuficientes. Es el caso de la bomba de calor ubicada bajo el suelo, que extrae el calor del agua y lo lleva a la vivienda. El sistema de ventilación se basa en unidades integradas en los bancos. Y en cuanto a la iluminación, toda ella está basada en LEDs de bajo consumo con sensores de luz diurna y movimiento.
Fotografías: Markus Bollen.
