En general, cuando te mostramos viviendas situadas en Nueva York suelen ser lujosos apartamentos con todas las comodidades posibles. Sin embargo, en la ciudad de los rascacielos también se sufre de problemas de espacio en los pisos. Un buen ejemplo es el East Village Studio, un apartamento de tan solo 46 metros cuadrados que fue remodelado en 2009 por el estudio Jordan Parnass Architecture.
Perteneciente a un cliente que utilizaba su vivienda para trabajar y que tenía la necesidad de almacenar muchos juguetes y piezas de arte peculiares, el apartamento requería una reforma urgente. ¿Quieres descubrir el resultado? ¡Pues acompáñanos!
Principales objetivos
Después de hablar con el cliente, el estudio tenía claro cuáles eran los principales objetivos del proyecto. El primero de ellos era deshacerse del desorden, lo que requería de mucho espacio de almacenamiento. El segundo era definir y organizar los espacios funcionales para cocinar, limpiar, vestir y dormir. Por último Jordan Parnass Architecture tenía el propósito de que el espacio fuera más adulto.
Un refugio acogedor en la ciudad
Así, el estudio apostó por una paleta de colores mínima que hiciera de esta pequeña casa un refugio acogedor en la ciudad. Además, explotó al máximo todas las posibilidades para el almacenamiento y combinó los espacios en un núcleo central con paneles de madera intricadamente esculpidos. El espacio restante se mantiene lo más flexible posible y todas las superficies de armarios están terminadas en un blanco de alto brillo para hacerlo más adaptables.
Altamente eficiente y flexible
El resultado es un espacio de vida altamente eficiente y flexible que da cabida a las demandas de espacio referentes tanto al trabajo del cliente como a su estilo de vida personal. A continuación te dejamos con nuestra galería, donde podrás encontrarás más imágenes de este minúsculo apartamento situado en Nueva York.