Esta casa formada por distintos módulos de apariencia similar se halla en Barcelona y su nombre es Casa AA. Diseñada por el estudio de arquitectura OAB y edificada entre los años 2006 y 2010, la construcción responde a unas sencillas reglas aritméticas que crean armonía entre los volúmenes. Por ejemplo, la planta del edificio se ha establecido mediante una cuadrícula de 7 x 7 metros superpuesta sobre el terreno, y sobre la cual se ha levantado la construcción como si de una partitura musical se tratase.
La vivienda goza de una excepcional comunicación entre los interiores y el jardín exterior, hasta tal punto que muchas estancias, como por ejemplo el salón, parecen formar parte de éste último. Esto se ha logrado gracias a los enormes paneles acristalados de las fachadas.
Para incrementar esta comunicación interior-exterior también se han dispuesto paneles de celosía y puertas de cristal correderas. Por otra parte, la diagonal trazada en la cuadrícula de la planta establece la estructura de la cubierta, que sube y baja como si se tratase de una cadena montañosa artificial. Gracias a esta particular configuración, la casa cuenta con claraboyas y altísimos techos que amplían visualmente los espacios.
La planta principal y el resto de los pisos se encuentran comunicadas en vertical gracias a la escalera. En la planta baja están las áreas de servicio, como por ejemplo un sótano que tiene acceso directo al salón o una sala de vídeo que se comunica con la librería. También hay una piscina interior con baño turco, una extensión de la habitación principal y un área de servicio que lleva directamente a la zona de la cocina.
Fotografías: Alejo Bagué.
