Esta magnífica vivienda, a pesar de su modernismo radical, rompe eficazmente la monótona inclinación hacia las líneas rectas y los volúmenes cúbicos que caracterizan muchas construcciones actuales. Las líneas suavemente curvadas que van dando forma al edificio se combinan con un revestimiento en un blanco radical para crear una lujosa vivienda, agradablemente asentada en un jardín de bella configuración.
La casa se encuentra en Weinberg, un barrio a las afueras de Stuttgart (Alemania) y es un proyecto de UNStudio.
La finca se encuentra en un emplazamiento privilegiado, entre la ciudad y un viñedo dispuesto en terrazas. La blanca construcción se organiza alrededor de un eje de circulación vertical que gira y rota en pleno corazón de la vivienda. La forma de ésta responde directamente a la de la topografía del terreno, de manera que la casa se adapta a las suaves lomas como si se hubiese posado directamente sobre ella. En el interior de la vivienda, los elementos del programa se distribuyen alrededor de las escaleras centrales, siguiendo el trayecto de sol en el cielo para beneficiarse al máximo de la luz natural.
A pesar de las sólidas estructuras de cemento que forman la casa, se ha conseguido un equilibrio que proporciona al interior una sorprendente ligereza. En ambas fachadas, las enormes cristaleras ofrece las mejores vistas al jardín y, a ras de suelo, acceso directo a la amplia plataforma de la terraza-solarium que se comunica directamente con la piscina. Ésta forma parte también de la estructura de la vivienda, quedando delimitada con respecto de la verde pradera de césped gracias a la plataforma de cemento blanco en la que se inserta.
Fotografías: © Iwan Baan.
