La vivienda que aparece en estas imágenes une su austeridad en el diseño con su peculiar configuración, donde las líneas quebradas y el zigzag están presentes. Sin embargo, a pesar de esta rotura de la verticalidad y la horizontalidad, el proyecto de Paritzki & Liani Architects consigue un sorprendente equilibrio donde la modernidad es la premisa fundamental.
La vivienda se encuentra en Hofit (Israel) y ha sido terminada en el año 2012. Es una auténtica casa de lujo, con una gran superficie útil de 929 metros cuadrados.
La casa ocupa la totalidad de la finca y el edificio se adaptó a la forma del terreno, que además
presentaba un desnivel de subida de unos tres metros en total. Esto permitió crear una vivienda elevada sobre el suelo, que visualmente parece alzarse sobre el mar aunque en realidad, se limita a seguir el perímetro de la finca. El terreno fue rediseñado mediante planos oblicuos conectados de forma lineal, y manteniendo el eje de orientación de las curvas de los distintos niveles. Entonces se insertó el volumen de la casa, como si fuera una nueva fibra dentro del tejido del terreno.
La cubierta es el elemento que define la fractura entre los planos de la finca y los de la casa. También define el espacio interno de la vivienda y las distintas rampas. La adaptación de la construcción al terreno puede ser apreciada también desde dentro; el salón tiene un gran ventanal que se conecta visualmente con los jardines a varios niveles. La zona de servicios y el garaje están situadas en una “inserción” que crea la vivienda en el terreno, y que se curva suavemente para llegar a la zona de entrada-salón.
Fotografías: Amit Geron.
