Su nombre es Watervilla Kortenhoef, y fue diseñada por Waterstudio NL para ser finalizada en el año 2008. Esta inclasificable vivienda está a medio camino entre una casa flotante y una villa minimalista sin fachadas, y tiene en sus paredes de vidrio transparente una de sus mejores bazas. La idea era permanecer lo más cerca posible del agua, sin sufrir los rigores de las humedades y sin estar sometido al balanceo de las embarcaciones.
La casa se encuentra en Holanda, y el estudio de arquitectura la diseñó con la idea de que su planta baja se encontrara casi a nivel del agua.
Bajo esta planta, por increíble que parezca, hay un sótano donde se ubican los dormitorios y el baño. En el exterior, las paredes de cristal que van de suelo a techo tienen como misión ofrecer las mejores vistas posibles del agua y el entorno náutico que rodea a la pequeña construcción, de forma que el espacio interior se ve visualmente ampliado gracias a la transparencia del envolvente. Además, en la azotea hay una amplia terraza desde la cual las vistas son aún más impresionantes, si cabe.
Las estancias del sótano “subacuático” reciben luz natural gracias a un inteligente sistema de claraboyas cuadradas, ubicadas en el suelo de la planta baja. Así, a pesar del aparente pequeño tamaño de la vivienda, hay espacio suficiente para vivir con comodidad al contar la casa con tres plantas completas. La Watervilla Kortenhoef es sólo un ejemplo más de los proyectos del estudio Waterstudio NL, cuyo nombre indica la intensa relación con el medio acuático que siempre muestran sus trabajos.