Las casas flotantes son un auténtico lujo que combina el placer de sentirse mecido por las aguas, con la arquitectura más moderna y contemporánea. Precisamente la casa que aparece en estas imágenes es una de las más bellas e impresionantes que hemos visto últimamente. La vivienda se halla en el Canal Eilbek, en Hamburgo (Alemania), y más que una casa flotante es una auténtica “casa barco”.
Su exterior, revestido en su parte baja con planchas de acero cortén, es todo un homenaje a los antiguos cascos de hierro fundido de los barcos pero convenientemente adaptado a la arquitectura más moderna.
Esta maravilla de la arquitectura flotante es obra del estudio de arquitectura alemán Sprenger von der Lippe, y descansa entre dos puentes del canal. Con los amarraderos ubicados considerablemente por debajo del nivel de la calzada y las orillas abruptas que descienden hacia el agua cubiertas de vegetación natural, la vivienda ofrece una experiencia única de privacidad e intimidad a sus habitantes.
La planta que se halla directamente sobre el agua aloja las habitaciones privadas, que proporcionan la necesaria privacidad a sus ocupantes al encontrarse lejos de la vista desde las orillas del canal. Por otra parte, también dispone de espacio para un salón que mira directamente a las tranquilas aguas del canal. El nivel superior contiene las estancias comunes, con vistas más elevadas del panorama desde la cocina y el comedor. Esta planta está realizada con una estilizada estructura de acero oscuro, que soporta los grandes paneles de cristal que permiten disfrutar de las mejores vistas desde el interior.
Fotografías: © Meike Hansen, Archimage.
